Nos encanta cuando encontramos este tipo de ideas. Novedosas, naturales y fáciles de hacer. Lo mejor para los amantes del «Hazlo tú mismo». “Musgo Graffitti” se llama esta técnica y aparte de estar buenísima, lo que más nos gusta es que es amigable con el planeta.
Aquí les compartimos los pasos para que puedan hacerlo y decorar los espacios de sus oficinas, casas o paredes del barrio. Anna Garforth lo ha llevado a decoración de festivales, marcas y empresas.
3 tazas de musgo (lavado, libre de partículas del suelo)
2 tazas de suero de leche o 2 tazas de yoghurt (debe ser yoghurt natural)
2 tazas de agua o cerveza
Media cucharadita de azúcar
jarabe de maíz (opcional)
una licuadora (que es probable que no quieras utilizar para otra cosa)
1. Lo primero que debes hacer es lavar el musgo. Asegúrate que no esté seco.